¿Qué es un esguince?
Un esguince es un estiramiento o desgarro de ligamentos, las bandas resistentes de tejido fibroso que conectan dos huesos en sus articulaciones. La ubicación más común para un esguince es en el tobillo.
El tratamiento inicial incluye reposo, hielo, compresión y elevación. Los esguinces leves se pueden tratar con éxito en el hogar. Los esguinces severos a veces requieren cirugía para reparar los ligamentos rotos.
La diferencia entre un esguince y una distensión es que un esguince daña las bandas de tejido que conectan dos huesos, mientras que una distensión implica una lesión en un músculo o en la banda de tejido que une un músculo a un hueso.
Síntomas de los Esguinces
Los signos y síntomas variarán, dependiendo de la gravedad de la lesión, y pueden incluir:
- Dolor
- Hinchazón
- Hematomas
- Capacidad limitada para mover la articulación afectada
- Escuchar o sentir un “estallido” en su articulación en el momento de la lesión
¿Cuándo visitar al médico por un esguince?
Los esguinces leves se pueden tratar en casa. Pero las lesiones que causan esguinces también pueden causar lesiones graves, como fracturas. Debería visitar a un médico si usted:
- No se puede mover ni soportar peso sobre la articulación afectada.
- Tiene dolor directamente sobre los huesos de una articulación lesionada.
- Entumecimiento en cualquier parte del área lesionada.
Causas del esguince
Un esguince ocurre cuando extiendes o rasgas un ligamento mientras estresas severamente una articulación. Los esguinces a menudo ocurren en las siguientes circunstancias:
- Tobillo: caminar o hacer ejercicio en una superficie irregular, aterrizando torpemente desde un salto.
- Rodilla: pivotar durante una actividad deportiva.
- Muñeca: Aterrizaje en una mano extendida durante una caída.
- Pulgar: lesión por esquí o sobreextensión al practicar deportes de raqueta, como el tenis.
Los niños tienen áreas de tejido más blando, llamadas placas de crecimiento, cerca de los extremos de los huesos. Los ligamentos alrededor de una articulación a menudo son más fuertes que estas placas de crecimiento, por lo que los niños tienen más probabilidades de sufrir una fractura que un esguince.
Factores de riesgo de un esguince
Los factores que contribuyen a los esguinces incluyen:
- Condiciones ambientales. Las superficies resbaladizas o irregulares pueden hacerlo más propenso a sufrir lesiones.
- Fatiga. Los músculos cansados tienen menos probabilidades de proporcionar un buen soporte para sus articulaciones. Cuando estás cansado, también es más probable que sucumbas a fuerzas que podrían estresar una articulación.
- Mal equipo. El calzado u otro equipo deportivo mal ajustado o mal mantenido puede contribuir a su riesgo de sufrir un esguince.
Prevención de los esguinces
Los ejercicios regulares de estiramiento y fortalecimiento para su deporte, estado físico o actividad laboral, como parte de un programa general de acondicionamiento físico, pueden ayudar a minimizar su riesgo de esguinces. Intenta estar en forma para practicar tu deporte; no practiques tu deporte para ponerte en forma. Si tiene una ocupación físicamente exigente, el acondicionamiento regular puede ayudar a prevenir lesiones.
Puede proteger sus articulaciones a largo plazo trabajando para fortalecer y acondicionar los músculos alrededor de la articulación lesionada. El mejor aparato ortopédico que puede darse es su propio “aparato ortopédico”. Pregúntele a su médico acerca de los ejercicios de acondicionamiento y estabilidad apropiados. Además, use calzado que ofrezca soporte y protección.
¿Cómo tratar un esguince?
Para el autocuidado inmediato de un esguince, pruebe descanso, hielo, compresión, elevación:
- Descanso. Evite actividades que causen dolor, hinchazón o molestias. Pero no evites toda actividad física.
- Hielo. Incluso si está buscando ayuda médica, congele el área de inmediato. Use una compresa de hielo o un baño de hielo y agua con hielo por 15 a 20 minutos cada vez y repita cada dos o tres horas mientras está despierto durante los primeros días después de la lesión.
- Compresión. Para ayudar a detener la hinchazón, comprima el área con una venda elástica hasta que se detenga. No lo envuelva demasiado apretado o puede dificultar la circulación. Comience a envolver al final más alejado de su corazón. Afloje la envoltura si el dolor aumenta, el área se adormece o se produce hinchazón debajo del área envuelta.
- Elevación. Eleve el área lesionada por encima del nivel de su corazón, especialmente en la noche, lo que permite que la gravedad ayude a reducir la hinchazón.
Hoy en día gracias a las investigaciones e innovaciones tecnológicas se cuenta con tratamientos no invasivos para el tratamiento y la recuperación de una zona afectada por un esguince, el tratamiento que cada vez se usa más es la Magnetoterapia.
La Magnetoterapia permite tratar la lesión como también los síntomas de dolor alternando el programa a usar.
El uso de tobilleras con estabilizadores laterales son de gran ayuda durante el proceso de recuperación y para evitar futuras lesiones.
En el caso de esguinces de muñeca, las Muñequeras con férula palmar son las mejores para estos casos.
Para esguinces de rodilla se recomienda el uso de rodilleras con flejes laterales.
Los esguinces de pulgar son poco frecuentes y se recomienda una inmovilización de la zona del pulgas usando una órtesis de inmobilización de pulgar.
Siempre consulta con tu médico de confianza o fisioterapeuta.