¿Cuál bota Walker es la adecuada?
Para decidir cuál walker es la adecuada, al momento de elegir entre las características de una bota ortopédica, quizás su aspecto no sea lo primero a considerar, ya que se trata de un artículo necesario para un proceso de rehabilitación y cuidado luego de una cirugía o un traumatismo.
Con relación a este punto, se deben hacer varias consideraciones, las cuales van a depender del tipo de patología o lesión que debe ser tratada. Por esta razón, en función de la localización del traumatismo o gravedad de la lesión, una bota Walker alta puede ser más ventajosa y adecuada que una bota Walker corta.
Por otra parte, contar con cámaras de aire hinchables puede ser una característica importante para tener en cuenta con el fin de ayudar con la hinchazón.
La siguiente lista no pretende ser exhaustiva, lo más aconsejable es consultar al médico.
Walker cortas o largas:
Las botas ortopédicas Walker largas
La Walker largas, por lo general, se usan para esguinces agudos de tobillo, fracturas por estrés de la parte inferior de la pierna, lesiones de tejidos blandos de la parte inferior de la pierna y fracturas estables del pie o el tobillo.
En primer lugar estas botas brindan apoyo para la inmovilización de la pierna en comparación con las botas ortopédicas cortas. Se aconseja su uso después de la cirugía ya que brindan soporte, protección y, esencialmente, inmovilización de la pierna.
También contribuyen a acelerar el proceso de curación, por lo tanto puede ayudar al pie a pasar a las etapas de soportar más peso después de la lesión inicial.
Botas cortas para caminar
Se utiliza principalmente para casos de cirugía postoperatoria del pie, fracturas metatarsianas y dedos del pie, y traumatismos de tejidos blandos del pie y el tobillo.
A diferencia de las Walker largas, es más conveniente para lesiones menos severas que no necesitan tanto apoyo. Además evitan la irritación de la espinilla
Diferencia en botas Aircast y las Estándar
Las botas ortopédicas Aircast, larga y corta, están dotadas con una bomba que infla una vejiga de aire que proporciona la compresión necesaria para una mayor estabilización y amortiguamiento.
Ciertamente, esta característica adicional ayuda a mejorar la hinchazón que se genera durante el proceso de curación. Es decir, esta hinchazón se puede controlar mediante el uso de compresión y elevación adicionales.
La bota con cámaras de aire permite ajustar el nivel de compresión que se proporciona al interior de la bota. Esta característica le permite elegir el nivel de comodidad durante cada fase de la recuperación.
Además, ayuda a envolver mejor la pierna y reducir el movimiento dentro de la bota. Aunque es algo más costosa, definitivamente ayuda con la comodidad.
Bota ortopédica articulada
Esta categoría de Walker tiene entre sus atributos la capacidad de control de la flexo-extensión. Esta característica permite variar el ángulo de flexión y extensión del tobillo a lo largo del proceso de rehabilitación durante la rehabilitación. Por lo tanto, progresivamente se podrá recuperar su funcionalidad.
Particularmente son indicadas para postoperatorios y para lesiones como las fracturas, esguinces o tras un procedimiento quirúrgico que involucre el tendón de Aquiles.
¿Qué tamaño de bota ortopédica se necesita para caminar?
Si mide más de 1,80 m (6 pies) siempre se debe optar por una bota alta para caminar. Las botas cortas no proporcionarán el apoyo o la protección adecuada para las piernas largas.
También se dispone de botas walker pediátricas para los más pequeños.
Antes de tomar una decisión siempre es preferible consultar con el especialista sobre la bota ortopédica walker más favorable a su situación.